Vulvodinia

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Vulvodinia: qué es, causas y tratamiento

Seguro que has oído hablar de la candidiasis vaginal, pero ¿Sabes qué es la vulvodinia? 

Se trata de una afección menos conocida que puede ser igual de molesta, si no más. 

En este post queremos hablar de esta enfermedad y todas las cosas que necesitas saber sobre ella. Continua leyendo para saber mucho más:

¿Qué es la vulvodinia?

La vulvodinia es una condición de dolor crónico que afecta a la vulva, o a los genitales femeninos externos. Puede adoptar muchas formas, siendo la más común la vestibulitis vulvar o vestibulodinia. El dolor puede ir de leve a intenso, y puede ser constante o intermitente. No se conoce una cura para la vulvodinia, pero hay tratamientos que pueden ayudar a disminuir el dolor.

Se sabe que la vulvodinia afecta a mujeres de todas las edades y se ha comprobado que la llegan a sufrir hasta en el 16% de las mujeres

Esta es la razón más común por la que las mujeres acuden al ginecólogo por dolor vulvar.

Las opciones de tratamiento incluyen medicamentos tópicos, fisioterapia, bloqueos nerviosos y cirugía.

En cuanto a sus causas se desconoce el origen exacto de esta dolencia. Se cree que la vulvodinia puede estar causada por una combinación de factores, entre ellos:

  • -Inflamación o daño nervioso
  • -Cambios hormonales
  • -Alergias o sensibilidades
  • -Infección
  • -Espasmos musculares

Síntomas de la vulvodinia

Hay dos tipos de vulvodinia: la generalizada y la localizada. 

La vulvodinia generalizada afecta a toda la vulva y puede provocar una sensación de ardor, escozor o palpitación. La vulvodinia localizada afecta sólo a una zona de la vulva, como el vestíbulo, y puede causar un dolor profundo durante actividades como las relaciones sexuales, caminar o sentarse.

En cualquier caso, la mayoría de las mujeres con vulvodinia experimentan un dolor crónico que aparece y desaparece, o un dolor que es constante pero que puede variar en intensidad. 

Además del dolor, las mujeres con vulvodinia también pueden experimentar:

  • -Una sensación de ardor
  • -Una sensación de crudeza
  • -Un dolor punzante o agudo
  • -Una sensación de picazón o de arrastre
  • -Un dolor punzante o agudo
  • -Dolor

En cualquier caso, estas molestias pueden prolongarse durante meses o años, y puede ir desde un dolor leve hasta un dolor intenso que interfiere en las actividades diarias.

¿Cuáles son las causas de la vulvodinia?

La causa exacta de la vulvodinia sigue sin estar clara y es probable que intervengan muchos factores diferentes. Las hormonas pueden desempeñar un papel en algunos casos, así como las fibras nerviosas del suelo pélvico que son sensibles al tacto. Los músculos pélvicos también pueden verse afectados por un exceso de tono o hiperactividad, lo que provoca dolor crónico en la zona genital.

Además, la genética puede estar implicada en algunos casos de vulvodinia.

Todos estos factores pueden contribuir al desarrollo de esta afección, pero es necesario seguir investigando para comprender qué la causa exactamente.

Tratamiento para la vulvodinia y su eficacia

La buena noticia es que la vulvodinia es una enfermedad tratable. 

Aunque no existe una solución única para todos los casos, hay una serie de tratamientos eficaces que pueden proporcionar alivio.

Tratamientos tópicos

Se aplican directamente en la vulva y pueden incluir:

  • -Anestésicos locales: para adormecer el dolor.
  • -Corticosteroides: para reducir la inflamación
  • -Antidepresivos: para aliviar el dolor crónico
  • -Inhibidores de la calcineurina: para reducir el picor y la inflamación

Tratamientos sistémicos

Se toman por vía oral o se inyectan y pueden incluir:

  • -Aminoácidos: para aliviar el dolor y mejorar la función nerviosa
  • -Antidepresivos: para aliviar el dolor crónico
  • -Inhibidores de la calcineurina: para reducir el picor y la inflamación
  • -Terapia hormonal: para reducir los síntomas de la menopausia

Cirugía

En algunos casos, se puede recomendar la cirugía para extirpar la zona de tejido afectada. Esto suele hacerse sólo si otros tratamientos no han funcionado.

¿Cómo se diagnostica la vulvodinia?

No hay ninguna prueba que pueda diagnosticar la vulvodinia, por lo que suele ser un diagnóstico de exclusión.

Esto significa que, antes de diagnosticar la vulvodinia, hay que descartar otras afecciones que podrían causar dolor vulvar (como las infecciones por hongos, las afecciones cutáneas, las infecciones de transmisión sexual y la enfermedad inflamatoria pélvica).

El proceso de diagnóstico suele comenzar con un examen físico y una revisión de su historial médico. El médico también puede realizar un examen pélvico para buscar signos de otras afecciones que pudieran estar causando su dolor. Si se descartan otras afecciones y el médico sospecha que se trata de una vulvodinia, es posible que la remita a un especialista para que la evalúe.

Factores causantes de la vulvodinia

Hay muchos factores de riesgo diferentes que pueden contribuir al desarrollo de la vulvodinia. 

Algunos de los factores de riesgo más comunes son:

Un historial de infecciones de transmisión sexual: Las mujeres que han tenido infecciones de transmisión sexual como clamidia, herpes o VPH tienen más probabilidades de desarrollar vulvodinia.

Antecedentes de infecciones por hongos: Las mujeres que han tenido más de cuatro infecciones por hongos en un año tienen un mayor riesgo de padecer vulvodinia.

Antecedentes familiares de vulvodinia: Esta afección parece ser hereditaria, por lo que si su madre o hermana la padecen, usted puede ser más propensa a desarrollarla también.

Sensibilidad a ciertas sustancias químicas: Las sustancias químicas que se encuentran en el detergente para la ropa, el suavizante, el jabón e incluso el champú pueden causar irritación e inflamación en la vulva. Esto puede conducir a la vulvodinia.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que no todas las mujeres con vulvodinia tendrán todos estos factores de riesgo.

Prevención y pronóstico de la vulvodinia

El pronóstico de la vulvodinia es bueno. Aunque, no existe una forma segura de prevenirla.

Aun así, existen algunas pautas que puedes seguir y ayudan a mantenerla a raya:

  • -Hacer ejercicio con regularidad
  • -Mantener un peso saludable
  • -Evitar la ropa ajustada
  • -Usar ropa interior de algodón
  • -Evitar las duchas vaginales o el uso de sprays de higiene femenina
  • -Utilizar agua y jabón suave para limpiar la vulva.
  • -Evitar las bañeras calientes o los baños muy calientes

Por fortuna, la mayoría de las mujeres que padecen esta afección mejoran con el tratamiento y finalmente pueden disfrutar de una actividad sexual normal. 

Sin embargo, algunas mujeres pueden tener episodios recurrentes o seguir teniendo dolor crónico.

Por ello, la prevención y el pronóstico de la vulvodinia se centran principalmente en el control de los síntomas mediante cambios en el estilo de vida, como evitar jabones y otros productos irritantes, llevar ropa interior transpirable, evitar las duchas vaginales y pasar mucho tiempo sentada o de pie. Además, pueden recetarse medicamentos como esteroides tópicos, antidepresivos y anticonvulsivos para reducir los niveles de dolor. Las técnicas de fisioterapia, como la fisioterapia del suelo pélvico, también han resultado eficaces para reducir el dolor asociado a la vulvodinia. En última instancia, el objetivo de la prevención y el pronóstico de la vulvodinia debe centrarse en ayudar a la persona a controlar sus síntomas para mejorar su calidad de vida.

En conclusión: Cómo afrontar la vulvodinia

En conclusión, afrontar la vulvodinia requiere una combinación de tratamientos médicos, técnicas de relajación y cambios en el estilo de vida. Los medicamentos pueden ayudar a aliviar los síntomas, pero deben usarse con precaución. Las técnicas de relajación como la meditación y la terapia cognitiva conductual también son útiles para controlar el dolor. Estos tratamientos son particularmente eficaces cuando se combinan con hábitos saludables como una buena nutrición, ejercicio regular y descanso adecuado. El apoyo emocional es igualmente importante para ayudar a los pacientes a afrontar la vulvodinia.

Si crees que puedes tener vulvodinia, debes saber que no estás sola. Las investigaciones sugieren que hasta el 16% de las mujeres padecen esta afección en algún momento de su vida.

Puede ser difícil aceptar una enfermedad crónica como la vulvodinia. Puedes sentir que has perdido el control de tu cuerpo y de tu vida. La buena noticia es que hay tratamientos específicos que puedes aplicar para recuperar el control.

Estos son algunos consejos para hacer frente a la vulvodinia:

  • -Infórmese sobre la enfermedad. Cuanto más sepa sobre la vulvodinia, mejor preparada estará para afrontarla.
  • -Hable con su médico sobre los síntomas y las opciones de tratamiento. Puede ser útil que te acompañe tu pareja o un amigo cuando veas a tu médico para que pueda tomar notas y ayudar a defenderte.
  • -Únase a un grupo de apoyo o a una sala de chat para mujeres con vulvodinia. Compartir tus experiencias con otras personas que entienden por lo que estás pasando puede ser increíblemente útil.
  • -Probar técnicas de relajación como el yoga o la meditación para ayudar a reducir el estrés. El estrés puede empeorar los síntomas de la vulvodinia, por lo que es importante encontrar formas de relajarse y desestresarse.
  • -Asegúrese de acudir a sus citas ginecológicas regulares y a las pruebas de Papanicolaou. La vulvodinia puede confundirse a veces con otras afecciones, por lo que es importante acudir a las revisiones periódicas para descartar otras posibilidades.

Si sospechas que puedes estar padeciendo esta patología no dudes en contactar con un especialista de Benuren.

Tu primera consulta es gratuita.

Preguntas frecuentes

¿Qué causa la vulvodinia?

Las causas exactas de esta condición no se conocen con certeza, pero se cree que una combinación de factores físicos, hormonales y emocionales pueden contribuir a su desarrollo. Por ejemplo, algunos expertos creen que la enfermedad puede ser desencadenada por un trauma muscular o inflamación en la zona genital, así como por las secuelas del uso de ciertos medicamentos o anticonceptivos. Estudios recientes también han relacionado el desarrollo de la vulvodinia con problemas psicoemocionales como la ansiedad o el estrés. Es importante señalar que los síntomas de esta condición varían entre pacientes; por lo tanto, es necesario realizar diagnósticos y tratamientos individualizados para aliviar los síntomas desagradables.

La vulvodinia es contagiosa

La vulvodinia no es una enfermedad contagiosa. Se cree que es causada por una variedad de factores, como infecciones, lesiones, alergias o irritación crónica. Esto significa que no puede ser transmitida de persona a persona. Sin embargo, hay algunos factores de riesgo genéticos y ambientales que pueden aumentar el riesgo de desarrollar esta enfermedad, incluyendo la exposición a ciertos productos químicos y algunas infecciones bacterianas e inflamatorias. Por lo tanto, si hay alguien en tu familia con vulvodinia, debes consultar con tu médico para evaluar tu riesgo personal de desarrollarla.

Dr. Fernando Aznar 

Comité científico de BeNuren

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