Las relaciones sexuales se basan en la intimidad, la confianza y la complicidad con la otra persona, pero también contigo misma. Sentirnos cómodas y relajadas durante el coito es fundamental para disfrutar. Es por ello que los cambios a nivel personal, laboral, emocional o físicos pueden deteriorar nuestra autoestima y alterar nuestro deseo sexual. Las dificultades influyen negativamente en la imagen que tenemos de nosotras y en la percepción, tanto personal como compartida, de nuestra satisfacción sexual. Si no nos sentimos bien con nosotras mismas, no tenemos la suficiente seguridad para entregarnos a otra persona.

El bajo deseo sexual se conoce como inapetencia sexual y a veces ocasiona problemas con nuestra pareja, deteriorando la relación. Hay ocasiones en las que es necesario recibir ayuda de un especialista para tratar las causas psicológicas de esta inapetencia. Pero hay otras en las que basta con aumentar nuestra autoestima y recuperar la intimidad con nuestra pareja. Toma nota, porque quizás estos consejos te pueden resultar útiles para aumentar tu interés sexual.

Ama tu cuerpo

Es importante conocer nuestro cuerpo, con sus limitaciones y modificaciones. Con el paso de los años nuestro cuerpo cambia y aparecen arrugas, estrías, canas o algunas zonas se vuelven flácidas. Esto es normal. Igual que cambiamos mentalmente, también lo hacemos físicamente. ¿Verdad que ahora no piensas igual que cuando tenías 20 o 30 años? Pues con nuestro cuerpo ocurre lo mismo. Solo debemos aceptar estas transformaciones y aprender a quererlas.

Dedica tiempo a la intimidad no sexual

Para lograr una relación sexual sana y feliz hace falta recuperar la confianza, comunicarnos, expresar nuestros deseos e inquietudes y delimitar bien los límites de la relación. El éxito de una relación íntima radica muchas veces en la propia relación no sexual, que requiere tiempo, respeto y atención. Para asegurarnos de que todo vaya bien y de recuperar la intimidad, es muy positivo pasar tiempo solos haciendo lo que más os gusta: salir a pasear, ver la televisión o simplemente contaros cómo os ha ido el día.

El sexo no se acaba con los años

¿Quién dijo que, con el paso de los años, el sexo se acaba? A menudo, con el transcurso de la relación no prestamos suficiente atención a nuestros nuevos deseos y los de nuestra pareja. Pero estos van cambiando y evolucionando a medida que pasa el tiempo, por lo que deberíamos actualizarnos cada cierto tiempo. Además, acabar con los tabúes sobre la edad y el sexo puede beneficiarnos si rompemos con la rutina y experimentamos. ¡Es hora de escuchar nuestro cuerpo!

Quiérete

Nuestro bienestar depende de muchos factores: mentales, físicos y emocionales. Pero todos ellos se reducen a una única cuestión: ser feliz, que depende de la autoestima, de nuestra percepción sobre nosotras mismas y de cómo nos sentimos. Es importante aceptarnos, perdonarnos, ganar seguridad, tratarnos con cariño y respeto y, sobre todo, querernos. Cuando nos tratemos como realmente merecemos será cuando recuperaremos nuestra confianza, seguridad y apetito sexual.

Si quieres prevenir, en la medida de lo posible, la inapetencia sexual te recomendamos reservar tiempo para la intimidad no sexual con tu pareja. Cuando en el día a día dedicamos tiempo para hablar y compartir tiempo a solas potenciamos una relación más estrecha, lo que normalmente lleva a sentir un mayor interés sexual.