Hay quien dice que no existe y hay quien dice que sí. Encontrar tu punto G puede que no sea fácil pero, desde luego, es posible.

Si conoces su historia desde hace tiempo, quizá sepas que quien lo documentó por primera vez fue el ginecólogo Ernst Gräfenburg  allá por los años 40 del siglo XX. Y de ahí viene la G. Más adelante, en el año 1982, fue cuando se desató la polémica con la publicación del libro “El punto G y otros descubrimientos recientes sobre la sexualidad humana” de Ladas, Whipple y Perry. Estos autores afirmaban que sí existía mientras que la comunidad científica dudaba de sus hallazgos e investigaciones.

¿Existe o no existe?

¡Claro que existe! Lo que no quiere decir que todas las mujeres lo sientan igual o que sea más o menos fácil de encontrar. De la misma forma que no todos los orgasmos son iguales ni todas las mujeres los sienten igual, los orgasmos alcanzados a través del punto G pueden tener distintas intensidades.

Ubicarlo es relativamente sencillo. Se encuentra en la pared interior de la vagina, entre tres y cinco centímetros de profundidad. Tiene una textura esponjosa y ligeramente abultada. Un buen truco es introducir un dedo en la vagina y flexionarlo hacia dentro como un gancho o una G, nunca mejor dicho. Ahí se notará la zona en cuestión, porque es una zona y no solo un punto pequeño.

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Disfrutar del punto G

Ya lo hemos situado y sabemos cómo encontrarlo. Ahora solo tenemos que disfrutar del placer que nos va a proporcionar. No hay que tenerle miedo. Si no funciona a la primera, sabemos que es divertido seguir intentándolo. Y si tienes problemas para encontrarlo, te damos una solución.

¿Y si fuese más fácil encontrar tu punto G?

Si ya lo has intentado muchas veces y ves que casi, casi lo tienes pero no estás segura, en BeNuren tenemos la solución ideal: Nuestro tratamiento “Descubre el mito” es justo lo que necesitas.

El tratamiento es bastante sencillo. Consiste en un tratamiento con ácido hialurónico en el punto G. ¿Y para qué? Como ya habrás oído y visto, el ácido hialurónico se utiliza, entre otras cosas, como relleno estético porque crea una estructura bajo la piel, que da volumen y sensación de naturalidad en las expresiones faciales.

Y en BeNuren hemos pensado que si nos sirve para el exterior, para el interior también. Con el tratamiento de ácido hialurónico en el punto G conseguimos engrosarlo y dotarlo de mayor sensibilidad. Si es más grande y más fácil de localizar, ¡mucho mejor todo!

Pide tu cita en BeNuren y descubre todo lo que puedes disfrutar con nuestro tratamiento “Descubre el mito”.