El 27,7% de los divorcios ocurren en personas mayores de 50 años, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), un porcentaje que sufre un aumento exponencial en los últimos años. Entre las principales causas se encuentra la falta de intimidad y las infidelidades.
Según el Estudio sobre Percepciones y Hábitos de las Mujeres Españolas durante la Menopausia, el 62% de las españolas mayores de 45 años siente miedo y preocupación por la llegada de la menopausia, y cómo este proceso afectará a su calidad de vida y a su relación de pareja.
Son mujeres jóvenes, con muy buena salud y, probablemente, se encuentren en su mejor momento personal, profesional y social, indica el ginecólogo del Centro Médico de la Mujer – Alborán y asociado de BeNuren Gabriel Fiol, y explica: “Comienzan a lidiar con la atrofia vaginal que va en aumento y que la limita su relación íntima con su pareja”.
¿Afecta la atrofia vaginal a la estabilidad de pareja?
La menopausia se define como la fecha concreta en la que la mujer tiene la última regla, tras un año sin haber presentado menstruaciones, y explica el Dr. Fiol: “Deberíamos decir postmenopausia al periodo posterior a la menopausia”, y destaca: “Lo importante son las secuelas y alteraciones que sufre la mujer, provocadas por el descenso de los estrógenos, debido al cese de la función de los ovarios”
La edad media de la menopausia en España se encuentra alrededor de los 51 años. En la actualidad, el 83 % de las mujeres de esta edad se encuentran atravesando este periodo, que puede venir acompañado, entre otros, por sequedad, comezón, picor, irritación o secreción vaginal. Síntomas intensos derivados de la atrofia vulvo-vaginal. “La Dispareunia, dificultad para mantener relaciones íntimas debido a los dolores, son los signos de la menopausia que condicionan y limitan la frecuencia, placer y el deseo”, afirma el ginecólogo Gabriel Fiol. asociado de BeNuren.
“El síntoma más frecuente asociado a la atrofia vulvo-vaginal, según el estudio de REVIVE español, es la sequedad (81 %), mientras que el dolor durante las relaciones íntimas -Dispareunia- apareció en el 25 % de mujeres”, indica el Dr. Fiol, y destaca: “ Sin embargo esta Dispareunia resultó ser el síntoma más molesto (74 %) para las mujeres en edad menopáusica”
Estos datos demuestran que la Dispareunia afecta directamente en las relaciones íntimas y, por tanto, en la estabilidad de la pareja, dónde “la mujer pierde literalmente la posibilidad de sentir placer y disfrutar de los momentos íntimos”, indica el ginecólogo Fiol. Además, la mujer está tan preocupada por las molestias y dolor, que afecta a su deseo, disminuyendo del la sensación subjetiva de la excitación y la lubricación.
La mujer se enfrenta a una etapa de su vida, dónde su relación se pone a prueba y, según varios estudios, las parejas son más felices y duraderas si mantienen una intimidad activa. Además de lidiar con los signos físicos de la menopausia, los miedos y la preocupación por la relación se ven acentuados con los cambios hormonales, pudiendo sufrir depresión, ansiedad, irritabilidad y cambios de estado de ánimo.
Una solución efectiva: Láser de diodo
La terapia hormonal sustitutiva, hoy denominada «terapia hormonal de la menopausia” (THM) constituye el primer escalón de tratamiento, especialmente en los primeros años tras la menopausia. Asimismo, explica el ginecólogo Gabriel Fiol asociado de BeNuren, tras los resultados del estudio WHI, que evidenciaron un incremento del riesgo de cáncer de mama, este tratamiento ha sido ampliamente cuestionado y debatido, reduciéndose considerablemente su uso.
Por otro lado, la mujer cuenta con productos hidratantes, que se aplican diariamente en la zona íntima, y lubricantes, que debe usarse previamente a las penetración, ocasionando en la mujer, y en ocasiones por la espera y el parón de los juegos previos, que el líbido se pierda. “En ambos casos, estos productos pueden paliar la sequedad y mejorar la relación, aunque generalmente no alcanzan a compensar la atrofia producida”, confirma el Dr. Fiol.
Según la opinión de las mujeres que han participado en el estudio de REVIVE, el 33% de ellas destaca la incapacidad de los productos de prescripción por vía vaginal para restaurar el estado natural de la zona íntima y el 17% señala que afectan directamente a la espontaneidad en las relaciones íntimas, afectando a los encuentros con su pareja. Asimismo, las mujeres buscan soluciones alternativas dado que estos productos requieren de un largo periodo de tiempo necesario para que actúen adecuadamente y debido a los efectos secundarios indeseados.
“En general, todos los tratamientos locales precisan de un uso continuado y este hecho es presumiblemente el mayor condicionante, ya que la adherencia al tratamiento es baja o muy baja en casi el total de más mujeres que utilizan estos productos.”, confirma el Dr. Fiol, y hace hincapié en los nuevos tratamientos tecnológicos de BeNuren: “La terapia con láser de diodo (no ablativa) constituye la mejor alternativa para mejorar la atrofia postmenopáusica”
El Láser de diodo (no ablativo), enfocado a la regeneración tisular de la zona íntima, presenta multitud de ventajas tal como indica el ginecólogo Gabriel Fiol, asociado de BeNuren: “Es una opción cómoda, que requiere pocas sesiones, se aplica en unos 10 minutos y ofrece buenos resultados. Además, el efecto se mantienen a largo plazo y es un tratamiento carente de estrogenicidad u otros efectos deletéreos”, y añade: “En el ámbito de pareja, mejora las relaciones, así como la seguridad y autoestima de la mujer, la satisfacción personal y de la pareja”
Es un tratamiento enfocado a recuperar el tejido de la zona íntima sin producir quemaduras (no ablativo), a diferencia del láser de CO2. Mejora la elasticidad de los tejidos, reduciendo las pérdidas de orina, el escozor y el picor, aumenta la lubricación y tonifica el canal, mejorando a su vez el pH y así disminuye la sensación de picor.
“El Láser Vaginal penetra en el tejido hasta 2 milímetros, produciendo un calentamiento de la zona a tratar y reactivando la producción de colágeno”, indica el ginecólogo Fiol. El colágeno es muy importante para el tejido, ya que aporta elasticidad en la pared vaginal y aumenta el flujo sanguíneo, la lubricación y fortalece los ligamentos de soporte que rodean la vejiga.
Además, tal como indica Fiol, el láser permite combinarse con cualquiera de los otros tratamientos, mejorando aún más las posibilidades de recuperación de la mucosa y prolongando su actuación, e indica: “El Láser no requiere de analgesia ni anestesia, tampoco requiere reposo posterior, por lo que la mujer puede realizar su vida normal tras realizar cada una de las sesiones”
La importancia de la concienciación y divulgación
Como cualquier otra patología, concienciar y prevenir pueden ayudar a frenar el avance de la enfermedad. En España el patrón común de las mujeres, según ha detectado el Dr. Fiol en sus pacientes, es esperar más de 6 meses hasta comentar los síntomas con un profesional sanitario e indica: “En el caso de la atrofia, la mayor parte de las mujeres y sus parejas recurren al uso de hidratantes y lubricantes sin acudir al profesional”.
Del mismo modo, “los médicos no preguntamos por este deterioro concreto de la salud femenina cuando la mujer acude por otro motivo de salud”. España posee la menor tasa de diagnóstico de atrofia de Europa. Destacar, que solo el 10% de las participantes del estudio realizado por REVIVE, habían sido diagnosticadas por un profesional sanitario, observándose la mayor proporción en el Sur (11,9%) y la menor en la región Mediterránea (8,9%).
Todo esto conlleva a un déficit de información bidireccional acerca de la posibilidad de solucionar este problema y de todas las opciones de tratamiento que pueden ser ofertadas, con sus ventajas e inconvenientes.
Un volumen de mujeres que acuden a la consulta de Dr. Fiol junto a su pareja, durante su consulta hacen patentes y se refieren a las limitaciones en las relaciones íntimas con su pareja a causa de la atrofia. “En muchas ocasiones es la pareja la que aborda el tema, que le condiciona y limita, siendo éste el motivo principal por el que acompaña a la mujer a su consulta ginecológica”, destaca el ginecólogo asociado de BeNuren Gabriel Fiol.
En nuestra sociedad existe una concepción generalizada en la postmenopáusica de mayor edad, donde esta asume que se trata de un problema suyo y le gustaría mejorar para poder complacer a su pareja y a sí misma. “Afortunadamente las parejas más jóvenes, con menopausias más recientes, afrontan conjuntamente esta situación y buscan soluciones en los profesionales”, aclara el ginecólogo asociado de BeNuren Gabriel Fiol, y añade: “No cabe duda de que el estímulo mecánico de las relaciones sexuales mejora la lubricación y que acudir a hidratantes y lubricantes puede mejorar la situación. Sin embargo, estos tratamientos en muchas ocasiones son insuficientes y requieren una dependencia que puede interferir en las relaciones sexuales”
La diferencia entre las parejas más jóvenes y maduras es el conocimiento sobre la atrofia, dado que a día de hoy tenemos al alcance mucha más información gracias a Internet. Asimismo, en España la Sanidad Pública no oferta el tratamiento con láser para la regeneración para tratar la atrofia. Tampoco financia la mayor parte de los tratamientos médicos que podrían ser utilizados, siendo una barrera para la mejora de de la calidad de muchas mujeres, que por desconocimiento o falta de recursos lidian con la atrofia y sus consecuencias, entre ellas, renunciar a las relaciones íntimas.
Desde el punto de vista del Dr. Fiol, es necesario que la mujer conozca que la menopausia es una realidad que aparece en una época en la que se goza de una plena calidad de vida y concluye: “En la actualidad disponemos de tratamientos carentes de efectos secundarios que pueden ofertarse con garantía, seguridad y buenos resultados, mejorando la calidad de vida como es el Láser de Diodo (no ablativo)”.
Informarse de estos tratamientos hace que esta etapa sea más llevadera para la mujer y que los encuentros íntimos no sean un problema para ella ni un obstáculo para la relación de pareja.
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